La polémica historia de una fecha que, al menos oficial y formalmente, solo en la provincia cuyana es diferente a la del resto del país.
El primer Día del Padre celebrado en la Argentina fue el 24 de agosto de 1958, luego de una resolución del Concejo Nacional de Educación en ese sentido, instaurando la fecha en el calendario escolar de todo el país.
Considerado el Padre de la Patria, la fecha coincidía con el nacimiento de la única hija del Libertador, Mercedes Tomasa de San Martín y Escalada, ocurrido el mismo día pero de 1816.
Sin embargo, no duró mucho. En 1966 se instauró formalmente el tercer domingo de junio en reconocimiento a un padre… norteamericano: en 1909, Sonora Smart Dodd realizó un sermón en el que homenajeó a su progenitor, Willian Jackson Smart, veterano de la guerra civil de los Estados Unidos.
Según el panegírico, él solo había criado a sus seis hijos con amor y dedicación, tras el fallecimiento de su esposa durante su sexto parto. El hombre había nacido un 5 de junio y su hija propuso, concretamente, que en esa fecha de celebrara el día de todos los padres.
La propuesta tuvo repercusión nacional, celebrando informalmente en todo el territorio estadounidense la fecha propuesta por aquella hija en base al nacimiento de su abnegado padre.
Pero el presidente Lyndon B. Johnson, quien asumió el cargo tras el asesinato de Kennedy, decidió mucho más tarde, a mediados de los 60, que la celebración se corriera al tercer domingo de junio de cada año. Y el mundo cambió también.
Por razones que todavía deben dilucidarse (pero que se sospechan), en la Argentina también se adoptó ese domingo para homenajear a los padres. Lo mismo ocurrió con la mayoría de los países del planeta, con varias excepciones, por cierto, como Uruguay, España Alemania, Brasil y Mendoza…
En efecto, solo la provincia cuyana se mantuvo fiel a la memoria de San Martín y su doble paternidad: de la Patria y de Merceditas.
Por Ley 5131/87, reglamentada por Resoluciones 316/2000 y 774/2001, se instituyó que en todo el territorio mendocino se continuaría celebrando el Día del Padre cada día 24 de agosto. No obstante, podría decirse que hoy el padre mendocino tiene sus dos jornadas, porque el tercer domingo de junio no pasa desapercibido.
Vale recordar que lo mismo se quiso hacer para todo el país: en 2017, la Cámara de Senadores de la Nación trató un proyecto de ley que en su primer artículo señalaba: “Institúyase el 24 de agosto de cada año como ‘Día del Padre’ en honor a la fecha en que el General Don José de San Martín se convirtió en tal”.
El proyecto impulsado por los senadores mendocinos Julio Cobos (UCR) y Anabel Fernández Sagasti (FpV), sin embargo, no llegó a prosperar como ley, aunque también proponía que “se celebrará cuando la misma coincida con el día domingo, o en su defecto, el domingo posterior de cada año calendario”.
Otro caso extraordinario dentro de la Argentina se produjo el año pasado, cuando el gobernador Gerardo Morales decidió que, por razones meramente comerciales y debido a que Jujuy se encontraba en medio de un crudo brote de coronavirus, el Día del Padre se celebraría el domingo 12 de julio de 2020 en esa provincia.